La medicina internacional contra toda enfermedad

Sukru Kisa, es un ciudadano internacional que nos recuerda que el amor al prójimo es una medicina para todo dolor.

Fotografías: cortesía de Sukru Kisa 

En las imágenes, se puede expresar la mayor expresión que posee la humanidad para ser parte de la medicina de nuestros hermanos, que padecen alguna discapacidad física. Y es que el amor y la esperanza, expresado en un abrazo o en palabras con el poder de fortalecer la vida, son el milagro que cada uno podemos cosechar.

En las fotografías, el joven voluntario Sukru Kisa, quien es originario de Turquía, nos refleja desde la ciudad de Nueva York, que es posible el diseño de un mundo con solidaridad y amor. En el verano de 2017, Kisa viajó a esa ciudad estadounidense para transmitir su felicidad, con los hermanos que necesitan de esa medicina natural, que todos somos capaces de producir.

Escrito por: Ronnie Huete S.

Periodista internacional

Washington DC, 6 de diciembre de 2018. El pasado 3 de diciembre de 2018 se recordó a las personas que viven con alguna discapacidad física y el ciudadano internacional de origen turco, Sukru Kisa lo recordó con la importancia que se merece.

Kisa quien trabaja y vive en Washington DC, recuerda la grata experiencia que tuvo el verano de 2017, al poner en práctica el amor al prójimo mediante un voluntariado que realizó en la ciudad de Nueva York.

Y es que la Asamblea General de las Naciones Unidas en la resolución 47-3 proclama el día 3 de diciembre, como el día internacional de las personas con discapacidad.

Según un informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de personas viven con algún tipo de discapacidad.

Ya en la mente de cada lector de este artículo, se diseña la imagen de alguna persona que ha observado en la calle, intentando caminar o hacer alguna actividad, que una persona con las facultades normales da por sentada.

Sin embargo, quien de nosotros ha puesto sus intenciones para ayudar a las personas con alguna discapacidad física, o por lo menos se ha preguntado, la calidad de vida que lleva una persona que sobrevive con alguna dificultad en su cuerpo.

Así como el ejemplo de Sukru Kisa, quien, como buen ciudadano de este mundo, pudo exteriorizar sus sentimientos en acciones, cuantos de nosotros podríamos reproducir está acción, derribando así la estratagema que rige en el individualismo humano.

Es muy notorio que, en las agendas legislativas de las naciones en el mundo, prevalezcan los millonarios intereses de las grandes corporaciones, que son en esencia quienes controlan a los países o las grandes “inversiones” en la guerra que hacen las naciones, que mantienen el control de la paz en el mundo.

Pero cuando las legislaciones internacionales a través de sus parlamentos benefician al estatus económico mundial o “Establesmit”, concentrando todo su poder y beneficios a este emporio internacional, causa un sentimiento internacional de des-humanización.

El día internacional de las personas con discapacidad, debe hacernos recordar que el amor al prójimo debe de prevalecer en el itinerario de nuestras vidas, puesto que, si olvidamos la interdependencia entre los seres humanos, vistos como hermanos y no competencia, es un fuerte indicador que nos mantiene, como en una muerte viviente.

Muerte que es alimentada con el odio entre los seres humanos, desde el momento en que los dispositivos del poder visualizados en celulares, reemplazan las relaciones humanas y comunicativas.

Por tal motivo, el día internacional de las personas que viven con alguna discapacidad física, es un recordatorio para que los lideres mundiales, enfoquen sus políticas en beneficio de las personas con discapacidad, o bien en el fomento de la tecnología en soluciones medicas o en algún tipo de alternativa que facilite su desenvolvimiento.

Pero también es de suma importancia, que todos se involucren en mejorar la vida de nuestros hermanos, ya que de esta forma podemos mantener en vigencia el amor al prójimo y romper con el estereotipo de competitividad económica, que nos han implementado en el nuevo orden mundial.

Mas allá de situar al dinero como “herramienta fundamental” en la construcción de nuestras vidas, está por encima de este, el espíritu del amor y de la solidaridad que podemos compartir con nuestros hermanos, tal y cual lo expresó Sukru Kisa, quien es una prueba viviente de que es luz, en tanta oscuridad.